Focaccia casera: receta fácil y esponjosa paso a paso
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Prepara una focaccia casera esponjosa y deliciosa con esta receta fácil. Aquí te dejamos el paso a paso sencillo.
Focaccia de ajo y perejil
Focaccia de limón con romero
Focaccia con tomates cherry y aceitunas
La Focaccia es una masa de harina similar a la de la pizza, y como ella es parte de las exquisiteces que los italianos han permitido degustar al mundo. En Italia se consume en cualquier horario del día, caliente o fría. La receta que aquí presentamos tiene más encanto para el paladar, si se toma con un punto de temperatura templado.
La Focaccia contiene por poción 142 calorías, cinco gramos de grasa, un sólo gramo de azúcar, 21 gramos de carbohidratos, y cero % de colesterol. Terminada su elaboración, se puede guardar y consumir dentro de las 48 horas siguientes, manteniéndola en un recipiente cerrado.
Ingredientes esenciales para una focaccia perfecta
Cómo hacer masa de focaccia: receta paso a paso
- En un bol grande añadir 200 gramos de harina, la levadura, y el azúcar. Mezclar la mezcla con las manos hasta realizar una masa.
- Añadir el aceite y la sal fina a la masa. Seguir trabajándola con las manos.
- Agregar harina sobre la masa y sacarla del bol.
Tiempos de fermentación y trucos para una textura esponjosa
- Amasar durante unos 10 minutos hasta que coja elasticidad y homogeneidad (sí hace falta, agregar harina a la superficie para que no se pegue).
- Hacer una bola con la masa.
- Colocar más harina en el mismo bol que se había usado y colocar la masa.
- Dejarla en reposo durante 60 minutos, en un lugar cálido y tapada con un paño limpio para que fermente.
- Pasado ese tiempo, en el que habrá doblado su volumen, retirar la masa del bol y volver a darle un breve amasado.
- En una bandeja metálica aceitada y engrasada uniformemente, extender la masa con la ayuda de los dedos y presionarla hacia las esquinas.
- Con la yema de los dedos realizar varios huecos en la masa, y esparcir un poco de sal gruesa en su superficie.
- Rociar toda el área de la masa con aceite de oliva y cubrir con las hojas de romero. Dejar reposar otros 30 minutos.
- Precalentamos el horno a 250º C durante 10 minutos.
- Introducir la bandeja y hornear a esa temperatura, de arriba y de abajo, durante 15 minutos.
- Retirar la Focaccia del horno y dejar atemperar en una estancia con una temperatura media.
- Consumir con una temperatura cálida.
Ideas para toppings y variantes de focaccia
A esta receta base se la pueden añadir los toques que se desee. Es el caso de trozos de aceitunas por encima, pimientos, etc. También en la misma masa se puede dar algún sabor especial, pensemos por ejemplo en calabacín o calabaza triturada, que agregaremos a la masa.
Información nutricional: 1874 kcal
Tipo de cocina: Mediterránea
Tipo de comida: Almuerzo
Diferencias entre focaccia y otros panes italianos
La focaccia es un pan italiano con una textura esponjosa y una corteza dorada, similar a la pizza, pero más gruesa y aireada. Se diferencia de otros panes italianos como la ciabatta, que tiene una miga más alveolada y una corteza crujiente, ideal para sándwiches. A diferencia del panettone, un pan dulce con frutas y una masa más ligera, la focaccia es salada y suele llevar hierbas, aceite de oliva y sal gruesa.
También se distingue del grissini, los palitos de pan crujientes típicos del norte de Italia. Mientras la focaccia se disfruta sola o como acompañamiento, otros panes tienen usos más específicos, desde postres hasta bocadillos. Su versatilidad y sabor la hacen única dentro de la panadería italiana.
Cómo conservar la focaccia y mantenerla fresca más tiempo
Para conservar la focaccia y mantenerla fresca por más tiempo, es importante almacenarla correctamente. Si la consumirás en uno o dos días, guárdala a temperatura ambiente en una bolsa de papel o envuelta en un paño de cocina para evitar que se humedezca. Para períodos más largos, guárdala en un recipiente hermético en el refrigerador, aunque esto puede hacerla un poco más dura.
Para conservarla varias semanas, congélala en porciones envueltas en film plástico y colócala en una bolsa hermética. Al recalentarla, usa el horno a 180°C durante 5-10 minutos o una sartén caliente con un poco de aceite de oliva. Evita el microondas, ya que la volverá gomosa. Con estos métodos, tu focaccia seguirá deliciosa y esponjosa.